viernes, 16 de diciembre de 2011

Coche, transporte público o bicicleta

Ojo que no defiendo a ultranza ni uno ni otro. Creo que lo más inteligente es hacer un uso óptimo de cada uno de ellos. Pongámonos en situación: trabajo a casi 30 km de casa (con sus otros inevitables 30 km de vuelta). Antes iba a trabajar en coche, siempre. Debido a circunstancias que no vienen al caso no tuve más remedio que alternar el uso del coche con otro miembro de la familia. Al principio era un poco traumático pero poco a poco me fui dando cuenta que no era tan mala idea. Os lo explico:


Para ir en coche tengo que salir exactamente 1 h antes de mi casa. Conducir por carretera, autovía, autopista y ciudad un total de unos 30-35'. Aparcar a tomar por culo si no quiero arruinarme en un parquing subterráneo y caminar unos 20'. Llego al trabajo con un margen de unos 5-10' aproximadamente. Al volver lo máximo que puedo recortar son esos últimos minutos ya que tengo la suerte de poder salir puntual, tardo en llegar a casa un total de unos 50'. Total del día 1h50' en trayectos.

Ahora vienen los gastos. La mayoría de la gente sólo suele tener en cuenta lo que gasta en gasoil/gasolina y se autoconvencen de que el coche le sale más barato que el transporte público. En mi caso concreto tengo un gasto acumulado de gasoil de 0.08 €/km, lo que hace un total de 4.8 €/día. No parece mucho, pero es que el coche tiene otros gastos derivados del uso (no derivados pueden ser la ITV, seguro, rodaje... que andes o no andes hay que pagarlos igual). Pues bien, entre gasoil, averías, algún parquing, ruedas, aceite... el gasto sube a 0.13 €/km (en el último año). Gasto al día en ir a currrar 7.8 €. Cada vez que lo pienso me asusto, en serio.

El transporte público no lo tengo en la puerta de la casa, sino a unos 2 km. Pero por suerte tengo una bicicleta algo vieja equipada con una cadena y un candado serios. Salgo de casa a la misma hora que en coche. El transporte público me cuesta 3€ por ir y volver y tarda sobre 20' en llegar al destino. Después camino unos 15' hasta el trabajo. El camino inverso es el mismo y tardo lo mismo (salvo que pierda el transporte y tenga que esperar la siguiente salida, obviamente). El total del día son 2h.

Esta última opción tiene un inconveniente, que si por algún motivo no puedo usar la bicicleta tengo que desplazarme andando, lo que al final del día añade unos 30', ya serían 2h30'.

Sea como fuere hacer ejercicio es bueno, contaminar menos también y gastar 3 € en lugar de 7.8 € al día es lo mejor, sobretodo para gente inframileurista como yo. Además, puedo echar una cabezadita si tengo sueño o leer Twitter, Google Reader o lo que me apetezca en el móvil. Y como premio no tengo que lidiar con conductores imbéciles que no respetan stops, cedas y preferencias en las rotondas.

PD: el tema cambia completamente cuando se desplazan varias personas ya que el transporte público multiplica su coste, mientras que en el coche se divide. Pero eso ya sería otra historia.

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