Tirado por una avería en la alarma

El otro día el coche nos dejó tirados. Si no recuerdo mal es la cuarta vez en unos 8 años. ¿Tampoco está tan mal no**?. Bueno, el tema es que se apagó y al encender no hubo tu tía. La batería no era porque tenía fuerza de sobra para mover el motor. Sin embargo ni el más mínimo intento de detonación.


Gracias a una experiencia anterior con un Opel Kadett lo primero que se nos ocurrió fue la electroválvula que corta el gasoil en la bomba. Con una llave de tubo de las grandes la desenroscamos y quitamos una pequeña pieza del interior para que siempre dé paso al gasoil. Es un método de emergencia pero que durante dos días nos quitó del apuro. Lo único malo es que el coche no apaga ni quitando la llave. Se soluciona con meter una marcha larga, pisar el freno y soltar embrague. Calarlo, de toda la vida.


Compramos una válvula en la chatarrería por la cual nos cobraron 10 €. Razonable, nueva cuesta del orden de 60-70 €. La cambiamos y seguía sin funcionar. Vaya putada. Ahora teníamos un dilema: sabíamos que el fallo era de ese componente porque anulándolo el coche funcionaba, pero sin embargo al reemplazarlo seguía sin funcionar.

A la izquierda la bomba con la electoválvula (se ve la cabeza de color rojo). A la derecha la alarma del coche.

Si no era la válvula tenía que ser alguno de los cables que la controlaban que no estaba haciendo una gestión correcta. Y aquí es donde nos llevamos una sorpresa: había demasiados cables. Los cables rojo y amarillo parecía claro que habían estado allí toda la vida. Pero sin embargo tenían un conector en el medio y ahí metido un cable verde un tanto desconocido. Lo seguimos y descubrimos que iba directo a la alarma. Se veía que la alarma una vez conectada actuaba también sobre el encendido del coche. Probamos a anularla, esto es, desmontar los conectores azules y poner los cables rojo-amarillos directos a los otros rojo-amarillos de la otra punta. ¡¡Tachán!!. El coche arrancó. Estaba claro cual era la función de los cables verdes. Y también estaba claro que a la alarma se le había ido la olla y estuviese o no conectada siempre cortaba el paso del gasoil.

Aunque no se aprecia muy bien se ve como de la electoválvula que corta el gasoil (la de la cabeza roja) salen dos cables paralelos rojo-amarillo que se unen al verde que va hacia la alarma. Vuelven un poco más abajo para volver a conectar en los cables rojo-amarillos y así cerrar el circuito.

Esta es quizá la imagen más clara de todas en la que se aprecia como ahora la alarma tiene totalmente anulada la función de corte de encendido pasando a estar directos los cables rojo-amarillos igual que cuando el coche salió de fábrica.

Ahora es más fácil robar el coche pero sigue siendo igual de difícil robar en el coche pues el resto de las funcionalidades de la alarma siguen intactas como por ejemplo el sistema voluméticro.


** Si os pica la curiosidad os lo cuento: dos veces la batería que murió sin más y otra vez gracias a la combinación del impreciso indicador de combustible y a aparcar en una cuesta. Esta última no fue una avería propiamente pero tirado quedé, y varias horas por cierto.